Una vez los empleados estén edad y quieran realizar su retiro laboral, pueden realizar el pedido de su debida pensión la cual será otorgada por el IMSS (Instituto Mexicano del Seguro Social).
Como la pensión otorgada por el IMSS puede que no sea suficiente para que el empleado tenga una vida luego de su retiro, algunas empresas optan por llevar a cabo sus propios planes de pensiones, por separado del IMSS, que sean adicionales al mismo.
Entonces, los planes privados, son aquellos que se realizan de forma voluntaria, llevado a cabo por el empleador, o de una contratación colectiva, en la que se busca entregar una jubilación a los empleados adscritos a la misma.
Estos tipos de planes pueden ser clasificados en tres: contribución definida (a nombre de cada empleado, deberá aportarse el monto por concepto de la contribuciones), beneficio definido (es aquel monto de beneficio que le corresponderá a cada empleado con el derecho a una pensión), mixto o híbrido (monto que se aportará a nombre de cada empleado así como también de la pensión).
Por la característica del plan, podemos clasificarlos según su administración (sistemas privados, sistemas públicos) y para el financiamiento (no contributivos: el beneficiario de la futura pensión no participe en el financiamiento del mismo; contributivos: el beneficiario aporta para el financiamiento de la pensión).
En el CONSAR se llevan a cambo los registros electrónicos de los planes y pensiones (SIREPP). En este sistema se almacenaran e ingresaran aquellos datos personales proporcionados. Ya que a la hora de llevar el registro en el mismo, de forma electrónica, deben presentarse las características, participaciones, aportaciones, beneficios del plan, a demás de los recursos financieros y los Rendimientos y Política de Inversión del Fondo.
A demás, todos aquellos datos serán derivados al IMSS para que el mismo analice si cumplen con los requisitos necesarios que aparecen en la Ley del Seguro Social
